LIBRO CERCLE

15 Historiadel Círculo E l CírculoArtísticodeBarcelona –que lucedesde1917el títulode «Real» en su denominación por especial concesión del rey Al- fonsoXIII–esunade las institucionesquehadesempeñadounpapel más importantedentrode la historiadel artedenuestropaís. Dehecho, el Círculoyahabíavenidomanteniendoexcelentes relacio- nes con la Casa Real desde 1906, año en que el artista Carlos Váz- quez realizóun retratodel reypara lasedede laentidad. Por aquellas mismas fechas, unadelegacióndel CírculosedesplazóhastaMadrid parapedirlealmonarcaqueestamparasufirmae inauguraraconella el LibrodeOrodelMontepíodeArtistasespañoles , volumenenel que aúnhoysesiguesolicitando lafirmade todas laspersonalidadesque visitan el Círculo. En sus orígenes había sido diseñada como una simple asociación donde convivían estudiosos y aficionados al arte en sus más varia- das formas de expresión; artistas ochocentistas y modernistas, sin encorsetarsedentrodeninguna ideologíao líneaestéticaconel finde preservar en todomomentosu inestimable independenciadecriterios como plataforma de representación de cualquier tipo de expresión artística de calidad. Es quizás por ello por lo que el Círculo pudo en su tiempo disfrutar de la incorporación activa de dos de las figuras catalanas más internacionales, Xavier Gosé y Anglada-Camarasa, quienes habían regresado a nuestro país ante el creciente belicismo queamenazabaEuropa. Entre sus fundadores, cabe destacar a los pintores Eliseo Meifrén, Modest Urgell, Joaquim Mir, Ramón Casas o Isidre Nonell. Todos ellos –que no son sino una pequeña selección de entre la larga lista de prestigiosos artistas que han desfilado por sus salas– dejaron su impronta de unmodo u otro. Fueron los tiemposmás gloriosos de la entidad, con casi mil quinientos socios y un gran peso dentro de la sociedadbarcelonesademás alto nivel. El marcado eclecticismo del que la institución siempre ha venido ha- ciendo gala desde sus inicios, permitió que bajo unmismo título lle- garanaconvivirpersonalidadesartísticasde la talladeGalofréOller y un jovencísimo IsidreNonell, que ya entonces comenzaba adespun- tar en el mundo del arte. El únicomovimiento que no tuvo la fortuna de arraigar en la institución fue el vanguardismo, pese a contar entre sus socios conmuchos seguidores.